Pero hoy, mientras me comía una deliciosa ciapatta de brie con sobrasada....me he dado cuenta de que necesitaba desahogarme. Y es que no se puede estar rallando continuamente a los que nos rodean con los mismos temas.
Pues no estoy pasando un buen momento laboral. Y lo peor es que me está afectando en el terreno personal, lo que es inaceptable. Lanzamos un nuevo proyecto en la empresa con la que colaboro. El lanzamiento fue largo y extenuante. Pero ahora sacarlo adelante, es un desafío que yo me estoy tomando como una carrera de obstáculos. A pesar de que disfruto con casi todo el día a día del trabajo, me obsesiono con los resultados y con lo que no me ha dado tiempo a hacer y lo peor: sueño con el trabajo. Me despierto varias veces por la noche sobresaltada con pesadillas laborales y estoy agotada y con un careto.....
Sé que el 70% de mi malestar es culpa mía y está en mi solucionarlo. Y que haber dejado de hacer deporte no me ayuda. Pero no sé como hacerlo. Y hacía tiempo que no me sentía así. De hecho, una de las gracias que tenía lo de ser autónoma y trabajar de casa, era la flexibilidad, la libertad, la tranquilidad....Pero ya no.
El otro 30% de mi malestar es ajeno a mí, pero bueno, como trabajadores todos sabemos que el juego del tira y afloja de tener recursos o no y tiempo para completar tu trabajo es inevitable.
Pues ya está. Intento no perder la paciencia, dejar de pensar en el trabajo, pero no puedo, está omnipresente en mi mente.
Y ya está. Disculpad el chorro de lamentos. Solo soy una bloguera más buscando vuestra empatía
SE ACEPTAN CONSEJOS Y REPROCHES
Inma, creo que tus sentimientos y frustraciones son parte de la vida diaria de muchos de nosotros y no estas sola en esto. Todo lleva sacrificio y mucha paciencia. No pierdas la fé en lo que haces porque saldrás mas fuerte de todo ello, habrás aprendido más sobre tu trabajo, de los demás y de tí misma. Vuelve al deporte porque es fundamental para mantenerte estable en tu cabeza gracias a un cuerpo saludable ya conoces el "esprit sain dans un corps sain".
ResponderEliminarBesos desde el jodido Buenos Aires (jejeje)
Anne, gracias por tus ánimos y por pasarte por este riconcito de mi vida. Y creo que tengo que darle al yoga o algo de eso. ¡Animos a ti también, sé que tú también estás en un periodo agitado! Besos
EliminarInma:
ResponderEliminarQue te puedo decir guapa, que no te desmoralices..., que yo te comprendo, cuando una es fanática por el trabajo y de hacer las cosas bien, para así tener buenos resultados.
Pero que tu vida no se desbalancee..., un poco de ejercicio al aire libre, naturaleza, amor y familia y amigos...
Mira, éste año nos toco comprender como familia lo que realmente era importante y así comenzamos a valorarnos y nuestros tiempos..., al final el trabajo sirve para sobrevivir, mientras no vivas para trabajar...
Mucho ánimo, aquí cuentas con nosotras siempre para desahogarte! y cuando quieras, darte un achuchón ;)
Y tienes razón, lo importante es la salud y el trabajo es solo una pieza más del puzzle de la vida. Por eso me enfada mucho sentirme así
EliminarInma, cuentas con toda mi empatía. Yo entiendo que vivas tu trabajo con intensidad, y que además este último proyecto te esté suponiendo muchísima implicación. Pero hay que relativizar, y darse cuenta de que el trabajo tiene que ser un medio, no un fin, no darle tanto espacio en nuestra vida (te lo dice una que no relativiza nada, y que en tu situación estaría tirandome de los pelos).
ResponderEliminarDe todas formas en el arranque de un nuevo proyecto es normal que todo sea mas intenso, pero si se prorroga demasiado, igual hay que parar y replantearse muchas cosas, no?
Mira, lo que nos solucionaría el asunto es que nos toque la lotería, eh?.
Muchos besos, y mucho ánimo!!!!
Matt, este artículo en el blog, ha sido un gran paso. Ahora me siento que tengo que hacerlo bien para no decepcionaros. Absurdo, pero efectivo
EliminarPues Inma, lo mejor que se me puede ocurrir para que desconectes un poco del trabajo es dar un buen achuchón a tus "tres peques" cuando lleguen a casa y ponerte a jugar con ellos. El tiempo pasa volando y cambian día a día.
ResponderEliminarY lo de soñar con el trabajo, pues es algo innevitable, por lo menos a mí me pasaba a menudo. Y da mucha rabia que además de las horas del día, el trabajo te quite horas de sueño, pero si consigues dividir tus horas del día en algo más que el trabajo, problamente te ocurra lo mismo por la noche.
Un beso muuuuuuuuuuuuuuuuuy gordo,
Neri
Neri, hay veces que en mis sueños me enfado por soñar con el trabajo. como un sueño dentro del sueño.
EliminarPreciosa, te aconsejo que no inviertas todo tu tiempo en el trabajo. Necesitas tiempos para desconectar y retomar las cosas descansada. Cuando uno se enquista en algo, lo mejor es relax y al cabo de una horas estás como nueva, pero relax de verdad no dándole vueltas a la chola sobre el tema :D
ResponderEliminarDesahogate todo lo que quieras en el blog, para eso es tu casa. Aquí mandas tú y eres dueña y señora de decir lo que te plazca.
Un besazo enoooorme
Lo sé...y por eso me duele sentirme así. Pero ayer me esforcé mucho, a ver si sigo así..
EliminarTienes que intentar encontrar un equilibrio entre tu trabajo y tu vida familiar... cuando te encuentres mejor contigo misma seguro que estas mas tranquila con el trabajo.
ResponderEliminarIrene, cuanto tiempo sin pasarte por aquí, gracias por volver. Tienes razón y esta autoterapia bloguera es muy buena
EliminarNo he desaparecido, sino que ultimamente tengo menos tiempo para comentar... pero sigo por aqui!!! Un beso.
EliminarA mí eso de soñar con el trabajo me pasa a menudo. Sobre todo cuando ando con algún marrón gordo entre manos. No sé qué aconsejarte porque adolezco más o menos de lo mismo pero que sepas que, lo que es mi empatía, la tienes toda. Un besote!!!
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